jueves, 29 de julio de 2010

¿Sois golosos?

 
Ahora que es temporada de los colores chillones, las playas, piscinas y helados, tenía ganas de apuntarme a la moda de los charms. ¿Cómo? Con una dulce tentación colgada al cuello o de la muñeca, los cupcakes que están últimamente en todas partes.

Recién salidos del horno y bautizados por mi hermana, os presento de izquierda a derecha a:


Cupcake de fresa, cupcake de caramelo Solano de fresa y nata, cupcake de regaliz, cupcake de chocolate y mirtilo o mirtilate (tiene que patentar ese sabor) y cupcake pitufin y vainilla.

¿No se os ponen los dientes largos?

miércoles, 21 de julio de 2010

Cerveló P3 edición limitada

   
Limitada no, limitadísma: Handmade 100% en fimo. Con lo emocionante que se está poniendo el Tour estos días con las polémicas de si hay que esperar o no a los rivales, bla, bla, bla, (lo veo tan absurdo como que Fernando Alonso tenga que esperar a Hamilton porque haya tenido un problema mecánico, por poner un ejemplo) y mi vuelta al fimo, rescato el recuerdo de un encargo del año pasado.

... todavía por piezas...

... ¡y terminada!

Se parece algo a la Cerveló P3 que lucía Fabian Cancellara en su día, ¿no? Ciclista que, por cierto, al igual que su compañero Andy Schleck, parece ser que sí saben esperar a sus compañeros, siempre que no tengan nada que perder, ya que si mal no recuerdo, el día del pavés bien que tiraban a pesar de haber dejado a un hermano y miembro de su equipo tirado sobre el pavés con la clavícula rota. Creo que hay aspectos del deporte que nunca llegaré a entender, ¿esperar o no esperar al rival en una competición?, la polémica está servida.
   

martes, 20 de julio de 2010

Increíble pero cierto

 
¿Alguna vez habéis deseado que en vez de el atronador sonido del despertador os despierte algo más melódico, más agradable? ¿Alguna vez os ha despertado el sonido de un globo aerostático? Yo ahora ya puedo decir que sí.


Como dijo una vez alguien que trabajaba para Adidas... "Impossible is nothing". 
¡Que empecéis bien la semana!
 

domingo, 18 de julio de 2010

Lacitos

martes, 13 de julio de 2010

Otro broche más

  
Esta vez con lazos.


lunes, 12 de julio de 2010

Otro broche

 
Otro de los trabajos que tenía por terminar...

sábado, 10 de julio de 2010

Enredando con cuero

 
Experimento con cuero y nudos chinos...


viernes, 9 de julio de 2010

Cositas

 
Hoy ha sido día de acabar varios de los trabajos que tenía guardadas en el cajón de las "cosas que algún día debería de terminar". Así que han visto la luz dos broches de hilo de aluminio y dos collares de cuero y fimo.


  



¡Y los collares con las enormes bolas de fimo!

Con la bola translúcida...



... y con la bola blanca de topos y flores...


jueves, 8 de julio de 2010

Haciendo limpieza

 
Ahora que por fin estoy en época estival, toca hacer limpieza de apuntes, armarios y sobre todo ordenador. Entre un montonal de archivos de autocad me he topado con un encargo que me hicieron el año pasado por estas fechas. Un cuadro de la antigua escuela de Ozaeta, un cuadro de un metro de ancho pintado con pasteles. Un mes entero con las manos manchadas de tizas.

Todavía pienso que las caras no son lo mío, pero, ¿a que no se nota?
 

miércoles, 7 de julio de 2010

¡Tengo un superabuelo!

  "Octogenarios sobre un sillín"

 Foto de "El Correo Digital"

..."Son tres y son leyenda. Han pasado de los ochenta y hacen entre 250 y 400 kilómetros a la semana en bici"... Con estas palabras han dado comienzo este fin de semana a un reportaje dedicado a tres de los más longevos cicloturistas en activo de la Sociedad Ciclista Vitoriana. Entre ellos, mi abuelo, el señor simpático de los guantes azules. El reportaje está genial, aunque yo quiero dedicarle mi versión ampliada. 

Desde que tengo uso de razón he visto madrugar a mi abuelo los domingos, desayunar fuerte, ponerse una hoja de periódico debajo del maillot (el mejor cortavientos desde que el mundo es mundo), ajustarse la gorrilla con la visera apuntando al cielo, a lo Coppi y a la carretera con mis padres y mi tío mientras mi hermana y yo apuntábamos maneras con mi abuela. En verano montaba la bicicleta en el coche, para rodar por carreteras que no conocía antes de darse un baño en la playa. 
 
Todavía sigue saliendo todos los domingos, o todos los que el clima vitoriano le permite, que los catarros no se curan de la misma forma que cuando era joven, aunque siempre tendrá una salud de hierro. Las salidas mañaneras de los domingos y las apuestas familiares por quién ganará el Giro, el Tour o la Vuelta siempre siempre siempre serán sagradas.


Lo que nos queda todavía por aprender...